Existen personas que se acercan a la práctica del yoga debido a los notables cambios que han visto en otros o porque alguien les ha contado acerca de los beneficios de esta disciplina. Pero ¿Qué es exactamente el yoga y por qué está ganando tanta popularidad en la actualidad? ¿Cuáles son sus orígenes?
El yoga es una filosofía ancestral que se originó en la India hace unos 5000 años. Nuestros antepasados lo practicaban como una forma de buscar una conexión más profunda y la introspección, lo cual difiere significativamente de la forma en que se practica el yoga en Occidente en la actualidad. Esta evolución no es necesariamente negativa; la vida cambia y se adapta para satisfacer las necesidades de la sociedad contemporánea. Sin embargo, es importante comprender los orígenes de esta disciplina, ya que aporta un significado profundo a la práctica del yoga.
El Significado de la Práctica del Yoga:
Cuando hablamos de "práctica de yoga", no nos referimos simplemente al tiempo que pasamos sobre la esterilla realizando posturas o centrando la atención en una sola cosa, es decir, iniciando la meditación. Me refiero a cómo esta práctica nos acompaña a lo largo del día, desde el momento en que nos despertamos hasta el final del día. Por lo tanto, quiero compartir las enseñanzas que he adquirido sobre esta forma de vivir y estar en el mundo por medio de su filosofía, porque es la clave que le da el sentido a todo lo que simboliza la palabra yoga. Conocer los orígenes del yoga puede ayudarte a comprender mejor lo que puedes lograr con una práctica constante de esta disciplina.
De la mano de Emilio García Buendía, uno de los mejores profesores de filosofía del yoga, que he tenido el placer de conocer y aprender de él, te traigo las enseñanzas contenidas en los Yoga Sutras de Patanjali, un tratado filosófico que todo practicante de yoga debería conocer. Este texto se remonta a los primeros siglos de nuestra era, cuando surgieron los "Sistemas Filosóficos de la India". Los Yoga Sutras se atribuyen a Patanjali y están divididos en cuatro libros. En el primer libro, sutra 2, Patanjali define el yoga como "la detención de las fluctuaciones mentales", lo que se convierte en el objetivo central de la práctica del yoga según los Yoga Sutras.
Los Dos Caminos para Alcanzar la Meta:
Los Yoga Sutras de Patanjali también proporcionan los métodos para alcanzar esta meta, que se dividen en dos grandes caminos:
Camino del Primer Libro: Este camino se enfoca en dos conceptos clave: "abhyasa" (práctica intensiva) y "vairagya" (indiferencia hacia las cosas mundanas).
Ashtanga Yoga: Este camino se detalla a continuación y consta de 8 pasos clave para entender la práctica.
Como puedes ver, no hay secretos en el yoga; todo se logra a través de la práctica constante. Si te parece que estos principios son demasiado estrictos, piensa en pequeñas situaciones de la vida cotidiana que te distraen fácilmente y aplícalas a tu práctica de yoga. Al fin y al cabo, es lo mismo. Por ejemplo, si deseas aprobar un examen importante, necesitas estudiar y practicar intensamente (abhyasa) y eliminar las distracciones y obstáculos que te impidan avanzar (vairagya). Esto se aplica a todos los aspectos de la vida; gradualmente te enfocarás y vivirás en el momento presente, liberándote de patrones de comportamiento automáticos que te alejan de tu verdadero yo.
Método del Ashtanga Yoga:
El Ashtanga Yoga consiste en la práctica de los ocho pasos o partes que se describen a continuación.
Yama: Se refiere a los principios ético-morales, que incluyen la no violencia (ahimsa), la veracidad (satya), la no apropiación (asteya), la castidad (brahmacarya) y la renuncia a lo material (aparigraha).
Niyama: Involucra disciplinas individuales y actitudes hacia uno mismo, que incluyen la pureza (sauca), la satisfacción (santosa), la práctica ascética (tapas), el estudio (svadhyaya) y la entrega a una divinidad (isvara pranidhara).
Âsana: Está relacionado con las posturas y el ejercicio físico. Cada âsana busca una postura estable y relajada, donde la atención se centra en el infinito.
Pranayama: Implica el control del flujo respiratorio a través de la interrupción de la inspiración y espiración.
Pratyahara: Se trata del aislamiento sensorial, desconectar los sentidos de los objetos a los que están expuestos.
Dharana: Implica la concentración, enfocar la atención en un punto o lugar, ya sea interno o externo, para detener las fluctuaciones mentales.
Dhyana: Es la meditación, la continuación de la concentración en un objeto elegido durante un largo período de tiempo, que lleva a la meditación profunda.
Samadhi: Es un estado mental en el que desaparece la dualidad "sujeto-objeto". Se considera el resultado de una práctica constante y se asocia con la iluminación.
Conclusión: A pesar de que alcanzar el estado de Samadhi en un mundo lleno de distracciones puede ser un desafío, no hay que subestimar el avance en esta dirección , ya que la conexión, el estudio y descubrimiento de una misma o uno mismo a la larga aporta una gran calma y felicidad. El yoga, en su esencia, es el camino hacia el bienestar y el autodescubrimiento, más allá de las posturas y los beneficios físicos. Todo lo demás se considera "maya" o ilusión.
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